miércoles, 22 de abril de 2015

PUBLICADO EN LA REVISTA DIGITAL MINATURA: YA ME DIRÉIS QUÉ OS PARECE MI CUENTO




TÁNDEM

-La Creación desencadenó la Evolución, la causa precede al efecto. Recuérdelo: yoo creé el Universo, yooo, de la nada hice al Ser Supremo de la Suprema Creación.
-En el hombre coexisten Creación y Evolución -responde el racionalista al Patriarca.
-Es posible. Quizá el ser humano tiene  miedo a encontrar la verdad y no mira por eso dentro de él. Oscila, al parecer, entre los vaivenes del deseo y el temor. El Big Bang es una teoría  -refiere el Omnipotente- que, si bien explica muchas cosas, no las demuestra.
-Le recuerdo a usted que tienen derecho a existir cosas científicas explicables pero no demostrables; y viceversa –responde Darwin orientando la mirada hacia el grotesco pseudosabio que, Biblia en mano, les ronda. Ninguno sospecha que es el demonio.

  Él, venerable mortal, siempre ha tenido claro que el hombre no fue creado por Dios a imagen y semejanza sino que más bien el hombre creó a Dios a imagen y semejanza.
“Así vivió y vive esclavizado por su propia visión dogmática, buscando por los siglos de los siglos el Santo Grial”, piensa, aún conciliador el líder de la Selección Natural.

-Teórica y prácticamente los dos modelos valen, ninguno estorba -le aclara al Señor-. 
-Es verdad -formula el Creador, reflexionando unos minutos-. Quizá, las dos doctrinas sincronizan y juntas dan respuestas a los grandes interrogantes. Ambos tenemos teoría y práctica, solo hay que ensamblar los dos eslabones en su correcto orden de proyección.
-A ver si entre tanto querer y no poder va a ser que podemos y no queremos -afirma él.

Los dos se han encontrado sin cita previa esa mañana en la Terminal del Cielo. Sedentes en el pedestal del Santuario, disertan. Aflora el pacto. La gente, como si emergiera de una Torre de Babel, mirando a las alturas pide a gritos, en todas las lenguas, consenso.

-Nace Cosmogónica Fússion, Señor –dice Charles, mostrando al Jerarca el documento con los membretes: el Cáliz y el Origen de las Especies, estampados a pie de página.

  Lucifer no pudo derribar el holding. Pero la historia es cíclica: un nuevo Big Bang obliga a empezar otra vez. Brota un nuevo Mundo, nueva vida, nuevos seres…

Mari Carmen Caballero Álvarez
 

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